Bienestar es entender el dolor: cuando no pueden decir “me duele”

A veces algo cambia. Esa perra que antes corría feliz al verte llegar ahora se muestra retraída, reacciona de forma inesperada o simplemente “ya no es la misma”. Y nos preguntamos qué ha pasado, qué estamos haciendo mal, por qué todo parece más difícil. Pero, ¿y si detrás no hay un fallo de convivencia, sino algo más profundo y silencioso? ¿Y si hay dolor?

Leer más

¡Inscríbete al evento!