¡No me está gustando esto! o algo no le cuadra… Fíjate con qué señal tan sutil puede estar tu perro diciéndote que lo que le estás proponiendo o la situación en la que está, no le gusta.
No le gusta, le está generando estrés, no sabe cómo afrontarla… en cualquier caso, un perrete que se moja la nariz con la lengua, no está precisamente en su salsa.