¡El verano está pegando fuerte! Y nuestros perros jadean, buscan la sobra y en ocasiones se recalientan demasiado… Y una excelente idea es aprender cómo meter a un perro en el agua de una forma amable y placentera… o mejor dicho, ¡cómo hacer que lo hagan ellos mismos!
Hoy, nos centramos en el baño de los perros para refrescarse y, ¿por qué no? disfrutar del agua si se tercia. ¿Empezamos?
Tener un perro reactivo en la vida cotidiana de una ciudad, con el ir y venir de gente, de coches, de ruidos, de otros perros… es desafortunadamente mucho más habitual de lo que podemos pensar.
En este seminario teórico-práctico Juan Revilla, educador canino, nos explicará con detalle cuáles son los principales problemas a los que podemos enfrentarnos en una gran ciudad con un perro en la familia y cómo actuar en cada caso para mejorar esta problemática y conseguir un perro sano emocionalmente y feliz.
Si tienes un perro en una finca o tu casa tiene un jardín muy grande, es posible que en algún momento te hayas preguntado si es necesario que tu perro salga al exterior, a pesar de que tenga todo el espacio para correr, hacer sus necesidades, darse unas buenas carreras y jugar.
Lo cierto es que si no sale, puede tener algunos problemas que te explico a continuación. ¡Así que sigue leyendo porque esto te interesa!
¡Comenzamos las clases grupales!
El lugar ideal para trabajar en grupo de una forma sencilla los comportamientos básicos del día a día que son necesarios para llevar a la práctica una buena convivencia.
Clases de máximo 6 perros para poder enfocarnos en las particularidades de cada alumno/a.
Trabajamos con reforzadores, no en base al castigo. Olvídate de usar cualquier tipo de herramienta o acción que provoque dolor o desagrado al animal: collares de ahorque, collares eléctricos, de pinchos, cordinos, tirones, gritos, “mordiscos”… ¡Porque es posible hacer que los perros deseen prestarnos atención! Y para ello no necesitas la fuerza o el dolor… sólo con tu inteligencia… y las pautas que te demos 😉
¡Comenzamos las clases grupales!
El lugar ideal para trabajar en grupo de una forma sencilla los comportamientos básicos del día a día que son necesarios para llevar a la práctica una buena convivencia.
Clases de máximo 6 perros para poder enfocarnos en las particularidades de cada alumno/a.
Trabajamos con reforzadores, no en base al castigo. Olvídate de usar cualquier tipo de herramienta o acción que provoque dolor o desagrado al animal: collares de ahorque, collares eléctricos, de pinchos, cordinos, tirones, gritos, “mordiscos”… ¡Porque es posible hacer que los perros deseen prestarnos atención! Y para ello no necesitas la fuerza o el dolor… sólo con tu inteligencia… y las pautas que te demos 😉
¿A quién va dirigido? A futuros/as adiestradores caninos que quieran hacer del entrenamiento canino una forma de vida, que sepan que la formación de calidad es un comienzo imprescindible para formar una … Leer más
En el artículo de hoy, vamos a analizar algunas de las señales de comunicación canina que dos de los perretes que vienen a la escuela de Sentido Animal se dan.
El vídeo está puesto a velocidad normal, y a continuación explicado con una velocidad del 50% para poder osbervarlo mejor.
¿Qué ves tú?
El transportín para los animales, o las jaulas, pueden ser tremendamente útiles para el entrenamiento y la educación de nuestros animales… pero no si se convierten en cárceles que nos evitan tener que prestar atención a nuestros compañeros.
El uso de estas herramientas de trabajo ha sido ensalzado y endemoniado a partes iguales, y hoy te explicamos lo que es un uso y un abuso de jaulas y transportines.
Y sin embargo lo tienes… Es posible que seas una madre o un padre que pensó que cuando su hijo/a decía «sí, pero seré yo quien lo cuide«, le creíste quizá sin pensar en la edad del/la niño/a. O quizá tu pareja es amante de los animales pero a ti no te entusiasman… Lo cierto es que hay versiones para todos los gustos, y al final te has visto con un can en casa que sobrepasa tu paciencia.
No sería la primera vez que escucho que un perro tiene que estar controlado en todo momento… y me parece tan alarmante como agotador.
Y en realidad no se me puede tachar a mí misma de no saber qué es lo que están haciendo mis perras en todo momento, pero la supervisión continua está alejada del control permanente.
A los perros hay que dejarles desarrollarse como perros, y para ello debemos establecer unas pautas claras de comportamiento, y a partir de ahí hacer un mantenimiento para que todo nuestro trabajo no se estropee.